EL RECOMENDADOR DE LIBROS

Logo Milenio
Logo Librotea
Estanterías

Libros para viajar sin moverte del sofá

Estas novelas te llevarán a paisajes remotos, ciudades interesantes y viajes interiores. Pura literatura contemporánea para viajeros de sillón.

Libros para viajar sin moverte del sofá. Foto: Getty
Libros para viajar sin moverte del sofá. Foto: Getty
David Rocha Molina Américas /

La mejor literatura no solo cuenta historias, sino que abre ventanas a mundos desconocidos. Estas novelas son pasaportes a pueblos, metrópolis y memoria histórica, para que vivas un sinfín de aventuras mediante una prosa exquisita y reflexiva. Ideales para quien quiera viajar sin moverse del sofá.

De pieles y lugares

Americanah, de Chimamanda Ngozi Adichie, representa una travesía de ida y vuelta entre Nigeria y Estados Unidos. Ifemelu, la protagonista, emigra a Princeton y descubre que ser "negra" es una categoría política que no existía en Lagos. Adichie teje un mapa de microagresiones, amores desplazados y la nostalgia por un hogar que ya no es el mismo al regresar. Las escenas en peluquerías africanas —donde se trenza el cabello y se intercambian chismes— contrastan con la soledad de los cafés universitarios estadunidenses. Este libro es un billete de avión hacia la diáspora, pero también un espejo para quienes han sentido que no pertenecen del todo a ningún lugar.

Miami se vuelve una suerte de limbo tropical donde el español y el inglés chocan, y el cuerpo de Francisca —una adolescente colombiana recién llegada— se convierte en campo de batalla. Juli Delgado Lopera mezcla en Fiebre tropical, una prosa bilingüe, humor ácido y un ritmo contagioso para llevarte por suburbios empapados de humedad, iglesias evangélicas kitsch y la presión de ser "la buena hija". Cada página huele a guayaba, sangre menstrual y perfume barato. No es un viaje turístico: es una inmersión en la violencia dulce de la migración, donde incluso el deseo homosexual debe camuflarse entre salmos.

Trayectos interiores

En Los diques, de Irene Solà, volver al pueblo natal se vuelve un acto de reconstrucción. Ada regresa a su tierra después de tres años en Londres y lo que encuentra no es un paisaje familiar, sino un territorio por reescribir. A través de relatos entrelazados —historias inventadas sobre vecinos, amores pasados y rincones del pueblo—, cada encuentro es un acto de creación. El pueblo ya no es solo un escenario: es un organismo vivo que respira a través de los cuentos que Ada teje para reconciliarse con él. La novela es un viaje circular, donde el movimiento físico (de Londres al campo) se vuelve secundario frente al verdadero trayecto: el que lleva de la memoria al mito, de la observación a la invención. 

Un hombre obsesionado con mapas antiguos recorre la Ciudad de México tras la pista de un amor perdido en las páginas de Mapas inútiles, donde Carlos Ferráez mezcla crónica urbana y ficción para guiarte por cantinas oscuras, librerías de viejo y avenidas donde el pasado y el presente se superponen como capas de papel amate. Los mapas del protagonista —llenos de rutas tachadas y bordes desgastados— son metáforas de cómo recordamos (y deformamos) los lugares que amamos. Una novela para quienes han buscado a alguien en cada esquina de una ciudad que ya no existe.

Libros para viajar sin moverte del sofá

Nos alejamos de la novela para entrar a esta increíble recopilación de ensayos donde Virginia Woolf narra sus travesías por Grecia, Italia y la Inglaterra rural. De viaje no es una guía turística: es un diario de sensaciones. Describe el azul del mar Egeo como "un lápiz recién afilado", el polvo en las carreteras españolas y la melancolía de los hoteles vacíos. Woolf viaja para escapar de su propia mente y sus palabras te llevan no a monumentos, sino al instante en que la luz del atardecer convierte una habitación ajena en hogar. 

Después de las descripciones afiladas de Virginia Woolf, volvemos a Inglaterra, pero de la mano de Kaliane Bradley en Un puente sobre el tiempo. En su trama, una científica vietnamita-británica viaja al Londres de 1888 para investigar a Jack el Destripador, pero el pasado se resiste a ser observado sin alterarlo. Bradley juega con el steampunk y la novela histórica para crear una ciudad donde el smog espeso esconde secretos feministas. El puente del título no es solo físico: es el que une a las mujeres asesinadas con sus versiones en otros tiempos. Una aventura que cuestiona si viajar en el tiempo es un acto de justicia o de violencia.

Tags relacionados
  1. libros