EL RECOMENDADOR DE LIBROS

Logo Milenio
Logo Librotea
Estanterías

Dr. Alexander Krouham: libros para entender la medicina funcional

El autor del libro "Medicina funcional" habla de los fundamentos de este sistema que prioriza el origen de los padecimientos, situando al paciente en el centro.

Dr. Alexander Krouham y los libros que cambian la óptica médica. Foto: cortesía
Dr. Alexander Krouham y los libros que cambian la óptica médica. Foto: cortesía
Verónica Maza Bustamante Américas /

La medicina funcional desafía la lógica fragmentaria de la medicina convencional. En entrevista,  el doctor Alexander Krouham, con una trayectoria que parte de la medicina interna y la endocrinología tradicional, nos habla de este sistema que prioriza el origen de los padecimientos crónicos, situando al paciente en el centro de su proceso de salud, como plasma en su libro publicado por Hachette Livre México, Medicina funcional. Además, recomienda libros que cambian la óptica médica.

Videoentrevista con el Dr. Alexander Krouham

Dr. Alexander Krouham: entrevista y libros recomendados
Dr. Alexander Krouham: entrevista y libros recomendados

Un nuevo modelo para entender la salud

El libro Medicina funcional. De paciente a protagonista surge, como nos comparte el doctor Alexander Krouham, de la necesidad de un "nuevo modelo de atención médica" para enfrentar lo que él define como la situación de salud más crítica de nuestro tiempo: la epidemia de enfermedades crónico-degenerativas.

Señala en entrevista la desconexión entre el sistema sanitario tradicional y la naturaleza de estos padecimientos. "El modelo convencional de salud que todos conocemos estaba mucho más diseñado para tratar enfermedades agudas", explica, mientras que problemas como "cáncer, arteriosclerosis, demencias, enfermedades autoinmunes, artritis, obesidad, diabetes" no han sido abordados de manera efectiva por ese esquema. Es este vacío el que da razón de ser a la medicina funcional y a su aliada, la medicina de estilo de vida. 

El objetivo central de su libro, publicado por Hachette Livre México, afirma, es "comunicar al público general que hay otras opciones, que no todo se puede o se debe de pretender atacar con medicamentos, sino que podemos tomar las riendas de nuestra salud y tomar decisiones que nos permitan vivir más, pero además vivir mejor".

La estructura del libro refleja este enfoque integral. Los primeros capítulos se sumergen en los cimientos científicos del modelo, haciendo "un análisis muy profundo sobre el papel de la genética, la epigenética, la toxicidad, los tratamientos como reemplazo hormonal, los hábitos de vida, por supuesto, nutrición, ejercicio, estrés, sueño". 

Sin embargo, el núcleo de la propuesta se despliega en cinco capítulos dedicados a áreas de mayor preocupación social. "El primero de ellos tiene que ver con envejecimiento", comenta el doctor, "e introducir conceptos como envejecimiento exitoso, edad biológica, porque hoy vivimos más, pero no necesariamente vivimos mejor". Le sigue un apartado crucial sobre el cáncer, buscando "entender qué es el cáncer, de dónde vienen los tratamientos, cuáles son las nuevas opciones y cómo la medicina funcional contribuye junto con la medicina convencional". 

La arterioesclerosis, "causa número uno de muerte en el mundo", ocupa un tercer capítulo, cuestionando "cuánto tiempo tarda en generarse un problema de esta naturaleza hasta que finalmente se manifiesta". Un cuarto bloque se dedica a la "obesidad, diabetes, problemas metabólicos", y el libro cierra con un análisis de las enfermedades del sistema nervioso, "desde autismo hasta Alzheimer, Parkinson, esclerosis múltiple".

La corresponsabilidad del paciente

La divergencia fundamental con el modelo convencional, según Alexander, reside en la pregunta por el "por qué". "La medicina convencional", describe, "obtiene información a través de la historia, la exploración física y estudios; una vez que recopila suficientes datos, establece un diagnóstico y a partir de ello elige tratamientos. Pero si tú te das cuenta, no hay un cuestionamiento respecto a por qué ocurrieron los problemas". 

Explica su punto: "¿Tienes diabetes? Vamos a iniciar un tratamiento para diabetes. El punto importante aquí es que no estamos comprendiendo las causas y por eso mismo los tratamientos no son curativos. No estás curando diabetes, no estás curando hipertensión, no estás curando problemas de colesterol elevado. Lo único que estás haciendo es controlar con fármacos". Frente a esto, la medicina funcional opera de forma radicalmente distinta. "En el momento que tienes el diagnóstico, ahí no termina el proceso. Ahora tienes que entrar a la raíz para entender por qué ocurrió". Este viaje hacia el origen se centra en procesos biológicos específicos; si se logra identificar qué los desequilibró, "entonces los tratamientos sí pueden ser curativos".

Sobre la viabilidad de implementar este modelo a gran escala, incluso en sistemas de salud pública, el doctor Krouham es enfáticamente optimista. "Sin duda. Primero, porque esta medicina, junto con la medicina de estilo de vida, tienen un enfoque mucho más preventivo". La clave, insiste, está en no esperar a la catástrofe para intervenir. "Y en segundo lugar, sí hay mucho que puedes hacer y de hecho poniendo en, corresponsabilizando al paciente, actuando como un equipo y no simplemente como un receptor pasivo que va a tener una recomendación de un medicamento y ahí se acabó su participación". 

Para cuantificar el potencial impacto, ofrece una estadística contundente: "De estas enfermedades, el 80% son enfermedades crónico-degenerativas. Bueno, pues de ese porcentaje, el 80% depende de hábitos de vida. Entonces, si yo conozco esa información y trabajo con esos aspectos, tengo muchísima oportunidad de resolver problemas mucho antes de que se generen las complicaciones". Esto, argumenta, no solo tendría un efecto dramático en el bienestar de la población, sino también en "las finanzas públicas, los servicios de salud". 

Su conclusión es directa: "En lugar de seguir construyendo hospitales que además en muchas ocasiones no van a resolver los problemas de manera definitiva, lo que tenemos que hacer es trabajar mucho antes de llegar a la necesidad de tener que recurrir a esos hospitales".

La recepción de este enfoque, según su experiencia, "está creciendo dramáticamente de manera muy acelerada". Atribuye este fenómeno a dos factores: una mayor conciencia sobre la salud y "un desencanto, tengo que decirlo, con la medicina común y corriente". 

Además, subraya un beneficio colateral significativo: "Esta medicina fortalece la relación médico paciente". Frente a las "consultas de 10 a 20 minutos, donde muy poco puedes conocer del individuo", esta práctica exige y facilita un vínculo más profundo. "Tienes que compenetrarte de manera muy profunda con quién es la persona, quién es el individuo que está padeciendo tal o cual problema, y en ese sentido eso establece un vínculo mucho más sólido". 

Esta evolución se manifiesta en su consulta, donde ahora recibe a personas que acuden "simplemente porque dice, 'Quiero estar bien, quiero mantenerme bien, estoy aproximándome a una etapa de vida, no quiero que haya un deterioro y quiero envejecer de manera correcta'". Para el Dr. Krouham, esto es una señal clara de que el paradigma está ganando terreno.

Medicina funcional

Medicina funcional

Alexander O. Krouham y Pablo Krouham
Hachette Bienestar

Sistema holístico 

Al abordar la integración de la mente y las emociones, un pilar irrenunciable de su modelo, su postura es categórica: "No cometamos el gravísimo error de pretender separar al individuo, digamos, la mente, o sea, lo que sería propiamente el sistema nervioso y el resto del cuerpo, es absurdo". Explica que el modelo operativo de la medicina funcional, desarrollado para ser accionable, coloca en su centro "lo que nosotros le llamamos la esfera neuroemocional y espiritual. ¿Y por qué está al centro? Porque reconoce que hay una relación en los dos sentidos". Esto significa que una alteración en el cuerpo repercute en la esfera emocional, y viceversa. 

Aclara, sin embargo, que este concepto va más allá de herramientas específicas como la meditación. "La meditación es una herramienta como muchas otras que hay. La respiración, la introspección, la visualización. El punto, sin embargo, es la conciencia. La conciencia que tenemos del aquí, del ahora, del porqué, de qué es lo que estamos haciendo". 

Para redondear esta idea, recurre al famoso Estudio Grant de Harvard, que durante décadas ha buscado determinar los factores de la felicidad humana. "Cuando empieza este estudio, la mayor parte de los participantes consideraban que la felicidad dependería de dos cosas: la fama y la economía. Y conforme se ha venido manteniendo este estudio, lo que ha sido cada vez más evidente es que lo que realmente genera felicidad son las relaciones interpersonales". Y añade, conectando con la fisiología: "Hoy podemos saber cómo ese tipo de situaciones tiene un impacto en nuestro sistema inmune, en nuestro sistema nervioso, en nuestro sistema hormonal".

El viaje personal de Alexander Krouham hacia este modelo nació de la frustración. "Yo vengo de la medicina convencional. Practiqué medicina convencional durante casi 20 años. Lo que a mí me llevó a este cuestionamiento fue una frustración porque aún haciendo lo correcto, siguiendo las mejores guías internacionales, yo no veía los resultados que esperaba en mis pacientes". Este "punto de quiebre" lo llevó al borde de abandonar la profesión, pero en su lugar, lo impulsó a "buscar nuevas alternativas". 

El resultado ha sido, en sus palabras, "sumamente gratificante" por dos razones principales: "La primera, por supuesto, porque los resultados que hoy veo con mis pacientes son muchísimo mejores. Pero no solo eso, el otro punto que para mí fue fundamental: me regresó a mí el amor por la medicina. Yo ya lo había perdido". Para él, este rencuentro con el propósito es un fenómeno que comparten muchos colegas que se acercan a este enfoque.

El libro, herramienta para la salud

Respecto al libro como herramienta de divulgación, aclara que "al menos el mío, no tiene recetas y no tiene indicaciones, porque tenemos que reconocer que cada uno es un individuo irrepetible". El objetivo, más bien, es "abrir conciencias. Simplemente decir, 'a ver, hay otras opciones, no te quedes solamente con la idea de que todo se va a resolver con medicamentos'". 

La respuesta de los lectores, asegura, ha sido muy favorable, motivándolos a "hacer cambios en sus vidas, a buscar otras alternativas de proveedores de salud o a tomar, como me gusta decir, las riendas de su salud". 

Sobre el coautor del libro, comparte que Pablo Krouham "es mi padre, no es médico, no es profesional de la salud, no tiene que ver nada con el medio de la salud". Lo invitó a colaborar para darle al texto el balance necesario para llegar al público general. "Mi padre hoy tiene 92 años y fue una experiencia fenomenal". Con especial cariño, recomienda leer el epílogo, escrito por su padre en diciembre de 2024, que relata "toda una situación de salud que él enfrentó a sus 91 años con una fractura de cadera y es su confrontación como individuo frente al sistema de salud". 

El doctor Krouham define el propósito final que lo impulsa: "Suena probablemente muy altanero o soberbio, pero el verdadero objetivo detrás de todo esto es devolverle la salud a México. Queremos una sociedad más sana y todos tenemos que participar en este sentido", finaliza.

Dr. Alexander Krouham y los libros que cambian la óptica médica

  • El principito - tapa dura azul

    El principito - tapa dura azul

    Editorial Guadal

    El Gato de Hojalata

    Comillas Logo

    El principito es el libro que más veces he leído en mi vida, y cada vez que lo he leído he sacado algo diferente.

  • La ciudadela

    La ciudadela

    A. J. Cronin

    BackList

    Comillas Logo

    Hay dos libros que cambiaron mi vida, porque los leí hace muchos años, justo cuando estaba por entrar a la carrera de medicina, pero no sabía por qué. Los volví a leer recientemente y me di cuenta del motivo: sorprendentemente hablan del modelo de medicina funcional y la confrontación con el problema de salud que hoy tenemos. Uno de ellos es un libro escrito en 1937 que se llama La Ciudadela, de AJ Cronin.

  • La Casa de Dios

    La Casa de Dios

    Samuel Shem

    Anagrama

    Comillas Logo

    El otro libro que cambió mi vida se llama La casa de Dios, de Samuel Shem, que es una confrontación de un médico joven durante su período de entrenamiento en su internado, su primer año de residencia, y resulta que Shem es un pseudónimo: el autor es psiquiatra, trabaja en el hospital Mount Sinai en Nueva York y lleva precisamente un área que tiene que ver con ética médica, con la filosofía de la medicina.

  • Sin límites (Outlive)

    Sin límites (Outlive)

    Peter Attia y Bill Gifford

    Gaia Ediciones

    Comillas Logo

    Recientemente he estado leyendo algunos libros de medicina que abren también el panorama. Uno de ellos de Peter Attia, que se llama Sin límites (Outlive), que habla de cómo envejecer. Sobre todo, te platica de lo que él denomina la década marginal, es decir, tus últimos 10 años de vida, cómo quieres vivirlos y qué es lo que tienes que hacer a lo largo de tu vida para prepararte para esos años y no tener ninguna discapacidad.

  • Alarga tu esperanza de vida ( Colección Vital )

    Alarga tu esperanza de vida ( Colección Vital )

    David A. Sinclair y Matthew D. LaPlante

    GRIJALBO

    Comillas Logo

    David Sinclair es un gran portavoz hoy en día de la longevidad. Es un investigador en Harvard que estuvo en el equipo que descubrió algunos de los genes que determinan cómo vivimos y cómo reparamos nuestro material genético. Son libros que pueden parecer técnicos, pero la realidad es que no están escritos para médicos, sino para el público en general y para quien tenga interés en temas de salud.


Tags relacionados
  1. libros